Viaje al Campo Charro (IV)

            Para terminar nuestro viaje por la dehesa salmantina aun nos quedaba la visita a  la finca Linejo donde se crían los toros del hierro de Montalvo.

En esta ocasión como en Barcial solo pudimos apreciar los machos ya que las hembras se encuentran en otra finca, pero el número de cabezas era bastante superior a las dos ganaderías visitadas antes.

            Montalvo es una ganadería de encaste Domecq que goza del gusto de las figuras y eso se muestra en el campo. Como ya pusimos en una entrada anterior nuestra visita fue de menos a  más viendo el estado actual de la fiesta. Empezamos por una ganadería a punto de desaparecer ya que no lidia en plaza y no quiere que sus toros tan solo sean para las calles, una ganadería con algo más de tirón en el festejo popular y que lidia alguna que otra corrida de rejones y una ganadería con más de la centena de toros que ya casi están vendidos. Lo que nos demuestra que la variedad de la fiesta está desapareciendo poco a  poco y creo que todos perdemos en esto.

            Pero vamos a  centrarnos en la ganadería de Montalvo, donde pudimos ver toros de distintas capas y algunos novillos con capas muy extrañas.

            En el primer cercado que visitamos se encontraban unos 60 toros de plaza de primera, destacando la igualdad de casi todos, imponentes de cara, aunque enfundados, y muy bien hechos.  De entre esos 60 saldrá la corrida para Madrid, que aunque no están colocados por lotes de 8 o 10 toros como suele ser habitual, pero podría valer casi cualquiera de ese lote de 60 toros por su igualdad. 

            Después un cercado con también alrededor de los 60 toros, estos con menos cara pero también con buena romana, de los que nos comentaron que saldrá una corrida para la localidad de Cantalejo.

            Para finalizar viendo utreros y erales en unos cercados muy amplios en los que disfrutan de buen pasto, por eso el brillo del pelo. Gran extensión que rodea el corredero por donde nos dijeron que hacen correr al lote de los 60 toros a la vez unas 3 veces a  la semana, quedándonos con las ganas de ver esas preciosas estampas.